FRONTERAS
Puntos calientes en el cruce entre países
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MEDITERRÁNEO
Operación Tritón es el nombre que recibe el programa de seguridad que se lleva a cabo en la frontera de la Unión Europea con el Norte de África. Liderada por Frontex (la agencia de control de fronteras de Europa), su objetivo principal es liderar el control de las costas italianas, así como la vigilancia de los flujos de personas de las mismas. Fue la sucesora de la operación italiana conocida como Mare Nostrum, que se retiró debido a su elevado coste; de hecho la Operación Tritón tiene un presupuesto mucho menor al de su antecesora. A la Operación Tritón la acompaña la conocida como Operación Poseidón, que extiende su área de custodia a las costas griegas. Sus principales objetivos son acciones de salvamento marítimo, además de la captura y destrucción de barcos propiedad de las mafias de trata de personas, que ha sido una de las medidas más polémicas del proyecto. Asimismo, también aquí está presente la externalización de fronteras bajo el pago a países africanos para que eviten las salidas de refugiados y migrantes “irregulares”.
EL MAGREB
Los países del norte de África han sido utilizados durante décadas por Europa como el principal agente de una política de externalización de fronteras. Las actuaciones de Marruecos han sido determinantes a la hora de reducir el número de personas que lograban y logran cruzar la valla (con concertinas) de la ciudad autónoma de Melilla y de la de Ceuta. En la actualidad, el Magreb está surcado por cinco vallas, tanto metálicas como de arena, que invaden el territorio: las vallas de Ceuta y Melilla con Marruecos, la situada entre Marruecos y Argelia, el muro del Sáhara y el de la frontera entre Libia y Túnez. Los motivos son esencialmente dos: la lucha contra el terrorismo y la inmigración irregular.
LOS BALCANES Y EUROPA DEL ESTE
Macedonia, ha sido uno de los países que más ha variado su política externa de cara a los refugiados de guerra; de las redadas realizadas en la capital, Skopje, y un continuo goteo de ataques en las fronteras sur y norte del país ahora ha pasado a prácticamente una total pasividad de cara a la crisis de refugiados. Serbia también se ha caracterizado desde el principio de la crisis por la inacción política. Por el contrario, el gobierno ultraconservador del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, es uno de los que ha aplicado políticas antiinmigración más rígidas. Desde hace semanas, refugiados de guerra, principalmente de nacionalidad siria, se han visto bloqueados de manera forzada en centros de refugiados, apenas acondicionados, y estaciones de tren. Además, se sabe que a partir del 15 de septiembre el ejército húngaro desplegará fuerzas del ejército y aprobará leyes que penalizarán fuertemente las entradas en el país de manera “irregular” incluso con penas de cárcel de entre tres y cinco años.
EL CANAL DE LA MANCHA/CALAIS
Situado entre Francia e Inglaterra, el túnel de Calais conecta los dos países a través de una carretera subterránea. Su entrada en el extremo francés (provincia de Calais) se ha convertido recientemente en uno de los principales puntos calientes de la actual crisis de refugiados. A diario miles de personas intentan cruzar el canal escondidos en camiones o trenes de mercancías con la intención de llegar a Reino Unido. Las incursiones son nocturnas y están protagonizadas por cientos de personas. En el primer semestre del 2015, la empresa privada que gestiona el Eurotúnel ha invertido 14 millones de dólares para reforzar la seguridad del canal, lo que incluye cercas, cámaras, detectores infrarrojos y guardias adicionales. A mayores, el puerto está protegido por vallas de hasta cinco metros que están cubiertos con alambres de púas y vigilados permanentemente por un circuito cerrado de televisión.
F R O N T E R A S
